Candidatos 2007 (II)

José Antonio Nieto Ballesteros nació en Guadalcázar el 10 de abril de 1970. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Córdoba. Entre los años 1991 y 1993 ocupó el cargo de secretario provincial del CDS, para pasar poco después al Partido Popular. Entre el año 1995 y 1999, fue concejal en Guadalcázar. A partir de ese año, ocupó el mismo cargo, pero en el Ayuntamiento de Córdoba. Ha sido también coordinador electoral regional del PP andaluz y vicesecretario general de Formación y Electoral del PP de Córdoba hasta el mes de diciembre del año 2002, cuando fue designado número dos del partido en la provincia. Desde las elecciones del año 2003 sustituyó a Rafael Merino como portavoz en el Ayuntamiento de Córdoba. En febrero de 2006 se hizo cargo de la presidencia provincial del Partido Popular. El 28 de junio de 2006 fue elegido candidato a la alcaldía de Córdoba por parte del Partido Popular.

• En el mayo cordobés, suelen aglutinarse algunos de los eventos de mayor importancia para la ciudad, como por ejemplo, Cruces, Patios, Feria y, en ocasiones, las elecciones municipales. ¿Por qué cree usted que pertenece a la mejor opción política para gobernar Córdoba en la próxima legislatura?

Porque Córdoba necesita un cambio en la mentalidad y en la gestión… y la única opción de cambio es el Partido Popular. Sinceramente, creo que no sólo es una posibilidad, sino que va a ser una realidad después del 27 de mayo. Ese cambio de mentalidad y de gestión se va producir.

• Una de las mayores fuentes de ingreso para nuestra ciudad es el turismo. ¿Qué proyecto tiene su partido para mejorar la calidad de este en Córdoba?

Nosotros creemos que Córdoba depende, en gran medida, del turismo. Actualmente, no tiene definida su oferta turística. Tampoco tiene perfilada la persona que pueda gestionar el turismo en Córdoba. Para nosotros, el turismo es una ‘cosa de comer’, y con las ‘cosas de comer’ no se juega. Por eso hemos hecho un programa diverso, que tiene en cuenta el turismo clásico, cultural y de visitas a edificios históricos, donde también entra el turismo gastronómico, de congresos, empresarial… el que permite que los hoteles puedan tener una ocupación completa todos los días de la semana y se puedan permitir empleo estable y de calidad. Esta es nuestra oferta. Además, pondremos al frente a una persona con experiencia y con capacidad, Rosario Alarcón, que estoy seguro que va hacer que se produzca un salto cualitativo en el turismo de la ciudad.

• La falta de un aeropuerto y conexiones con algunas capitales andaluzas por autovía impiden la llegada tanto del turismo, como del progreso empresarial a nuestra ciudad. ¿Qué medida de actuación tiene su grupo para comunicar y hacer de Córdoba una gran ciudad del siglo XXI?

Para estar en el mundo, Córdoba necesita un aeropuerto. Para nosotros es una prioridad absoluta disponer de un aeropuerto en el menor tiempo posible. Queremos que se empiece a utilizar ya el actual y contar con uno nuevo en siete u ocho años. Por otra parte, queremos que el Gobierno de España se comprometa en fechas concretas para la conectar por autovía Granada, Córdoba y Badajoz, un compromiso, de hace tiempo, que no se cumple. Queremos, también, que Córdoba sea el eje de la nueva comunicación con Madrid a través de la autopista Córdoba-Ciudad Real-Toledo-Madrid. Estas son las tres actuaciones fundamentales para nosotros.

• Desde hace varias décadas, vemos en diferentes medios de comunicación colosales proyectos con los que la ciudad iba a contar y que se quedaron en una simple maqueta. Como ejemplo, el monumento a los Califas en el Parque de la Merced o el Palacio del Sur, entre otros. ¿Qué proyectos culturales y viables tiene previsto en su programa electoral?

Nosotros creemos que el principal proyecto cultural viable que necesita Córdoba es ser Capital Cultural Europea en 2016. Es un objetivo intangible que requiere de actuaciones muy visibles en la ciudad y que se tienen que definir en un plan director de infraestructuras culturales. Este tiene que incluir el Palacio de Congresos, que sigue en el aire; un auditorio para nuestra magnífica orquesta, que también sigue en el aire; más espacios escénicos… Nosotros tenemos el Gran Teatro, pero podríamos decir ‘el único teatro’, porque sólo hay uno en la ciudad de Córdoba, algo muy escaso para ser Capital Cultural Europea. Necesitamos en Córdoba contar espacios donde puedan exponer su obra los autores cordobeses. Además, tiene que haber un espacio amplio y diverso para la creación, algo que la ciudad necesita y que se lleva esperando desde hace tiempo. Además, otro espacio fundamental para nosotros es un lugar donde los grandes creadores de letras puedan incrementar su formación y expresar su trabajo de forma libre.

• En el número 14 de Córdoba Eterna, Ramón López, director del Gran Teatro, nos aseguraba algo que todo el mundo conoce: la carencia de espacios escénicos en nuestra ciudad. ¿Contempla su opción la apertura de estos nuevos espacios para ampliar la oferta cultural al respecto? Sí varios. Entre ellos, el Cine Góngora, proyecto que aún desconocemos pero tiene que ponerse en marcha cuanto antes. Contemplamos también la construcción de un auditorio como sede de actuaciones musicales, fundamentalmente de la Orquesta de Córdoba. Queremos llevar los espacios culturales a los barrios. Creemos que no tiene por qué buscarse siempre esa referencia en el centro de la ciudad. Creo que se ha perdido una magnífica oportunidad en el solar de la antigua Prisión de Fátima. Nos hubiera gustado la existencia en el lugar de un gran espacio cultural para toda la ciudad. En cualquiera de los casos, todavía quedan ubicaciones idóneas para este tipo de equipamientos, que estoy seguro de que enriquecerán la cultura de la ciudad y potenciarán nuestra candidatura para ser Capital Europea.

• Vista desde el exterior, la candidatura de Córdoba a ser Capital Europea de la Cultura en 2016 puede dar la sensación de ser más una marca que una realidad. ¿En qué tanto por ciento cree usted que la ciudad tiene posibilidades para que el proyecto llegue a buen fin?

Yo le doy el cien por cien de posibilidades a la ciudad si se cambia al cien por cien, la forma de gestión. Coincido en que hoy es una marca, puro slogan electoral. Lo único que se ha hecho es recoger firmas y utilizar como excusa esa capitalidad para financiar eventos de escaso interés desde el punto de vista cultural y promoción de Córdoba. Creo que no hay una ciudad en Europa con más méritos que Córdoba para ser Capital Cultural Europea en 2016, pero si se trabaja bien. Lo nuestro son méritos heredados. Lo que tenemos que hacer, desde los gobiernos actuales, es poner encima de la mesa proyectos que complementen esa herencia que hemos recibido y que sitúan a Córdoba en una posición de privilegio.

• A modo de ejemplo, la emblemática plaza de Capuchinos y la Cuesta del Bailío, se encuentra en mal estado. ¿No cree usted que una ciudad Patrimonio de la Humanidad como es Córdoba tiene sus monumentos y fachadas algo descuidados?

Estoy completamente de acuerdo. Son ustedes tremendamente generosos situando sólo esos dos lugares. Podríamos ir a casi todo el casco histórico y encontrarnos fachada sí, fachada no, destruida, desconchada y prácticamente en ruinas. Eso dice muy poco de una ciudad que es Patrimonio de la Humanidad por decisión de la UNESCO. Tenemos el caso histórico más grande de Europa. Tenemos un valor que no sabemos reconocer y que estamos dejando morir el espacio más bello y más exportable. Nosotros vamos a proponer hacer el casco histórico habitable y vivo. Vamos a fomentar el que los cordobeses vuelvan a vivir en él. Vamos a eliminar el pago de licencias para aquellos que quieran trasladarse al caco histórico y rehabilitar una vivienda. Vamos a permitir que sea compatible la vida en el siglo XXI con la fisonomía y las características de vida del casco histórico de Córdoba. Eso es lo que yo creo que la ciudad necesita. Hacer que el casco histórico no sea un decorado que se derrumba, sino un espacio vivo, señero y de obligada visita a todos aquellos que vengan a la ciudad.

• ¿Tiene algún plan de actuación para solucionar esta mala imagen?

Tenemos un plan integral de actuación en el casco histórico, que tiene por objeto mejorar la accesibilidad y la imagen; permitir la habitabilidad; abrir a todos los cordobeses la importancia de residir en él; convertirlo en una gran zona comercial; y establecer opciones de ocio que hoy no existen. Un turista que venga un jueves y desee conocer la noche cordobesa, tiene muy pocas opciones. Éstas, tienen que ubicarse en nuestro caso histórico, que es la joya fundamental que tenemos junto a la Mezquita, Medina Azahara o las iglesias fernandinas. Es lo que podemos exportar y transmitir a las personas que nos quieran visitar.

• Uno de los buques insignia de nuestra ciudad es le conjunto palatino de Medina Azahara. ¿Ve usted alguna solución al conflicto ocasionado entre los vecinos y la Administración?

Sí. Creo que la solución pasa por el entendimiento y no por el enfrentamiento. Pasa por la asunción de responsabilidades por parte de la administración, tanto la municipal como la autonómica. Y pasa por la sinceridad. Actualmente, el impacto visual del entorno de Medina Azahara no lo están generando sólo las parcelaciones del entorno. Lo hace la forma en la que se ha construido en El Higuerón, los polígonos industriales que hay en la carretera de Palma del Río y la falta de previsión que desde hace mucho tiempo rige el desarrollo de esa zona de Córdoba. En este momento, creo que lo fundamental es unir la conservación de Medina Azahara con un espacio cultural nuevo, como sería un gran parque periurbano con proliferación de árboles de gran talla que aíslen y creen una atmósfera propia en el lugar.

• Para concluir, a Córdoba Eterna, como revista cultural, le gustaría saber cuál es para usted el hecho histórico o cultural relativo a nuestra ciudad por el que siente más admiración.

Yo creo que en Córdoba se han sucedido acontecimientos históricos de una talla impresionante. Sería una verdadera injusticia decantarse por alguno. Sin embargo, a mí me parece que hay uno que sobresale entre todos. Se trata de la decisión del Imperio Romano de situar, en este espacio que estamos ahora mismo, una de las principales ciudades de ese imperio. Corduba es una capital que nació hace más de 2.000 años y que no se asocia hoy a la imagen de la ciudad. Una de las obligaciones del gobierno municipal es transmitir al exterior que esta ciudad tiene más de dos mil años de historia y que es fruto de una suma de civilizaciones que han ido modelándola, creándola y orientándola hasta lo que es hoy. Si somos capaces de hacerlo ver fuera, será un sello que permitirá que Córdoba esté presente, con letras mayúsculas, en la cultura y el turismo mundial.